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Las Justas, experiencia medieval

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La historia de Las Justas

Corría el año santo jacobeo 1434 cuando el caballero leonés Don Suero de Quiñones, para demostrar su amor y conquistar el corazón de Doña Leonor de Tovar, solicitó permiso al rey Juan II de Castilla para llevar a cabo un torneo especial.

La hazaña caballeresca consistía en retar a todos los caballeros que pasaran por el puente de Hospital de Órbigo situado en la ruta del Camino de Santiago. Don Suero, con la ayuda de 9 caballeros amigos suyos, pretendía romper 300 lanzas a razón de tres por caballero y posteriormente peregrinar a Santiago de Compostela para demostrar así su amor. El torneo o justa fue conocido como el Passo Honroso, dado que el caballero que se negaba a participar se consideraba acto de cobardía y tras depositar su guante debía vadear el río.

El 9 agosto tras ser herido Don Suero, terminó el torneo y peregrinó con sus amigos a Santiago, donde se guarda la cinta y la argolla, una cadena de oro, que hasta allí portó, en la capilla de las reliquias de la Catedral. Don Suero se casó con Doña Leonor y tuvo dos hijos, el evento tuvo gran repercusión entre los poetas y juglares de la época, recogiéndose la hazaña en las crónicas del notario real Pero Rodríguez de Lena.

las justas, hospital de órbigo, león

Es por ello que desde 1997 en Hospital de Órbigo se celebra el primer fin de semana de junio, la recreación de la hazaña.

Las justas medievales del Passo Honroso, declaradas Fiestas de interés turístico regional, congregan a un montón de gente que durante todo el fin de semana pueden disfrutar del mercado medieval y diferentes  eventos cómo cortejos, juegos y bailes medievales, entrenamiento de caballeros, la procesión de las antorchas, pasacalles, actividades en el campamento, para finalizar con el gran torneo: Las Justas.

Para disfrutar de la fiesta nada mejor que vestirse de época, taberneros, campesinos, hechiceras, monjes, damas, caballeros, reinas, príncipes y princesas, recorren las calles del pueblo llenando de magia y alegría la pequeña localidad. Disfrutar de las cenas medievales, los deliciosos menús y el buen vino, en los restaurantes locales que se engalanan para la ocasión, es otro de los atractivos de esta celebración.

En el campamento medieval situado junto al Palenque podemos ver distintas exposiciones de armas, máquinas de asalto, cetrería, animales como ocas, pavos, burros, dromedarios. Así como los potes donde hacer la comida al fuego. ¡¡¡Todo espectáculo!!!

Escrito por Sara Consentini

Grado en Turismo, experta en Desarrollo de Proyectos Turísticos. Docente. Guía turístico. Social Media y Marketing turístico.

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